Muchas personas nuevas en la música tienen que decidir sobre la versión acústica o eléctrica del instrumento que quieren dominar. Los violinistas, guitarristas y bajistas son principalmente los que tienen este dilema con más frecuencia, pero los bateristas no están especialmente exentos de ello.

Las baterías eléctricas son un poco menos común que las guitarras eléctricas, pero esto no tiene que ver con la calidad de las baterías eléctricas con respecto a las baterías acústicas, sólo son el estigma y la comercialización los que han impedido convertirse en un objeto común entre los músicos. Pero esto está empezando a cambiar, ya que más y más personas están empezando a ver las baterías eléctricas como alternativas viables a las acústicas.

Bajo coste, alto valor

Uno de los mayores puntos fuertes de las baterías eléctricas es el hecho de que pueden hacer todo lo que una batería acústica puede hacer e incluso hasta un poco más. Y por un poco, nos referimos a que algunos kits de batería eléctrica tienen cientos de voces de percusión grabados en ella, con lo cual se puede experimentar con el sonido libremente.

Además otros tipos de sonidos vienen incorporados en los pre-ajustes del kit de batería, con lo que te permite jugar con diferentes configuraciones de tambores y platillos. Esto normalmente cuesta cientos y cientos de euros si quieres llevarlo a cabo en una batería acústica, pero sin embargo todo viene ya integrado en las baterías eléctricas.

Estudios portátiles

Otra función maravillosa de las baterías eléctricas sobre las acústicas, es la capacidad de grabar electrónicamente sobre la marcha. Esto le permite a los bateristas la capacidad de producir su música y compartirla sobre la marcha y ofrece a los músicos la capacidad de grabar y reproducir sus pistas para que puedan enviarlas a sus compañeros de banda y amigos. Esto permite la diversidad artística y la flexibilidad máxima con el mínimo esfuerzo, con lo cual, sólo alienta más y más tu trabajo como músico.

Durabilidad

Las baterías tradicionales tienen que estar afinadas con regularidad, a menos que tengas una batería de gran calidad, la afinación tiene que ser relativamente frecuente.

Afortunadamente para aquellos que prefieren las baterías eléctricas, el afinar es cosa del pasado, ya que los sonidos producidos por cada golpe son aquellos que se produciría por un palo golpeando una cabeza perfectamente afinada en un cabezal acústico. Esto significa que las baterías eléctricas ganan en términos de durabilidad, así como de versatilidad y funcionalidad.

Conclusión

Al final, lo que importa es que el instrumento haga lo que tú quieras y que lo haga tan bien como tú deseas. Para la mayoría de las necesidades musicales estándar, las baterías electrónicas son mejores.

Son versátiles, portátiles y duraderas. Literalmente lo único que las baterías eléctricas no deben ser utilizadas para grandes conciertos en vivo. Las únicas personas que deben comprar las baterías acústicas sobre las eléctricas son artistas que tocan en vivo. Incluso no está de más y es aconsejable que tengan un kit de batería eléctrico en casa o para lugares pequeños.

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